Desde muy temprana edad la inquietud por expresar sus emociones y sentimientos a través del arte, han hecho que Sophia se sumerja en un profundo deseo de conocimiento y formación.
Una rica diversidad caracteriza su obra. Temas que marcan el renacimiento de la mujer, el deseo de crecer, el ser uno mismo, etc.
Es una creación de un nuevo lenguaje personal, que le permite vislumbrar nuevos horizontes significativos.
Ocupar un sitio en el espacio es esculpirlo, expenderlo, habitarlo, revelar los secretos internos, dar todo lo que sea posible en lógica de lo visible.
Estas imágenes son emociones que se materializan por la fuerza profunda de mi ser.
Así es como he decidido llenar mi lugar en la Tierra, de una cosmogonía plástica a través de la cual yo puedo expresar mis emociones, cuya temática es el deseo de un profundo sentimiento de libertad.
Llegar a ser potencialmente quien eres exige trabajo, disciplina, formación. Arte es esculpirse modelarse cuando inicia una escultura es como pasarme en limpio interiorizarme, seleccionando pensamientos e ideas.
Toda innovación genera incertidumbre, respecto al camino que se recorre y al destino al que se llegara es un acto que invita a traspasar las fronteras de la cotidianidad, con la certeza que detrás de ella hay un cúmulo de velos que están ahí para ser recorridos por el Artista.